sábado, junio 10, 2006

Ahora

No entiendo es como si no sintiese. Extraño. Siento tanto. Pienso en tu indiferencia y en mi fragilidad, en mis máscaras y en tu “naturalidad”, en tus gestos y en mi miedo… En todas las noches en que fingíamos. En mis noches de insomnio y en las enormes ganas de darte ese abrazo, ese beso y el poder decirte ese algo; la esperanza era inevitable, esas líneas, el tiempo, la respuesta. Ahora, no sé muy bien si enfrentarte, se supone que yo ya dije todo…que tú también ya lo hiciste… Pero ¿¡debo enfrentarte!? ¿Será el momento [indicado]?. Y cuando estemos ahí, cara a cara, ¿Será todo rápido y pronto acabará? ¿O el mundo hará “auto –stop” y todo caerá?.
Porque ahora se que las fantasías, el huir y las evasiones no sirven, el escapar no nos lleva a ningún lado. Creo ha llegado el momento y he encontrado el lugar. A estas alturas no hay nada que perder. Nada.